Duelo perinatal: la importancia de humanizar las pérdidas. Post invitado por Liliana Lund, psicóloga perinatal.
Tengo el honor de presentar este post invitado escrito por Liliana Lund, psicóloga especialista en psicología perinatal, avalada por su larga trayectoria profesional. Es responsable de la web http://www.espacioperinatal.com/ una página en la que encontrarás información, asesoramiento y consulta sobre todos los aspectos relacionados con la psicología perinatal, desde la concepción hasta los primeros años del niño/a.
Duelo perinatal: la importancia de humanizar las pérdidas
La muerte gestacional y perinatal ha sido silenciada y
hasta negada tanto a nivel social como cultural así como impregnada por
diversos tabúes. Ésta circunstancia ha ido provocando que éstas experiencias
frecuentemente estuvieran inmersas en miedo, angustia, mucha desinformación.
Suelen llevar a un estado de aislamiento y frustración en las madres y padres
que se enfrentan a ésta situación.
hasta negada tanto a nivel social como cultural así como impregnada por
diversos tabúes. Ésta circunstancia ha ido provocando que éstas experiencias
frecuentemente estuvieran inmersas en miedo, angustia, mucha desinformación.
Suelen llevar a un estado de aislamiento y frustración en las madres y padres
que se enfrentan a ésta situación.
Pero estas circunstancias no sólo afectan a los padres, también
afectan a los profesionales sanitarios que en la gran mayoría de los casos
carecen de una formación que les proporcione distintas herramientas para
gestionar tanto sus propias emociones como la de las parejas o familias que se
encuentran en esta situación. Suele faltar una formación que les pueda
proporcionar técnicas de comunicación de malas noticias, soporte a la familia, los
trámites que deberán seguir, así como facilitar el contacto de los padres con
el bebé que ha fallecido. Para esto deberán conocer a priori cuáles son las
circunstancias que se presentan en los duelos de éste tipo, qué implican y cómo
se puede acompañar durante éste proceso a los padres.
afectan a los profesionales sanitarios que en la gran mayoría de los casos
carecen de una formación que les proporcione distintas herramientas para
gestionar tanto sus propias emociones como la de las parejas o familias que se
encuentran en esta situación. Suele faltar una formación que les pueda
proporcionar técnicas de comunicación de malas noticias, soporte a la familia, los
trámites que deberán seguir, así como facilitar el contacto de los padres con
el bebé que ha fallecido. Para esto deberán conocer a priori cuáles son las
circunstancias que se presentan en los duelos de éste tipo, qué implican y cómo
se puede acompañar durante éste proceso a los padres.
Es en buena medida con carencias de éste tipo dónde se
echa en falta la presencia de psicólogos perinatales ya que son los
profesionales idóneos que están realmente formados para estas situaciones. Hay
que destacar que ésta especialidad como tal, es de reciente creación.
echa en falta la presencia de psicólogos perinatales ya que son los
profesionales idóneos que están realmente formados para estas situaciones. Hay
que destacar que ésta especialidad como tal, es de reciente creación.
Pero de los diferentes profesionales de la salud y su
buena gestión de recursos y habilidades dependerá que los padres que deban
pasar por la dolorosa pérdida de su hijo/a puedan elaborar mejor o peor su
duelo e incluso que pueda llegar a ser una experiencia traumática que dejará
fuertes secuelas de por vida. Desde hace muy poco tiempo,
algunos hospitales han habilitado alguna zona para que los padres puedan
despedirse de su bebé. Alli les pueden bañar y vestirles con sus ropitas,
sacarles fotos para tener algún recuerdo de ellos y de ese modo darles un
status real. Sí que han existido.
Otro problema aparejado con la existencia de bebés fallecidos, es la
imposibilidad de registrar los nacimientos ya que la legislación no permite
inscribir sus nacimientos a menos que hayan nacido vivos y sobrevivido 48
horas*.
buena gestión de recursos y habilidades dependerá que los padres que deban
pasar por la dolorosa pérdida de su hijo/a puedan elaborar mejor o peor su
duelo e incluso que pueda llegar a ser una experiencia traumática que dejará
fuertes secuelas de por vida. Desde hace muy poco tiempo,
algunos hospitales han habilitado alguna zona para que los padres puedan
despedirse de su bebé. Alli les pueden bañar y vestirles con sus ropitas,
sacarles fotos para tener algún recuerdo de ellos y de ese modo darles un
status real. Sí que han existido.
Otro problema aparejado con la existencia de bebés fallecidos, es la
imposibilidad de registrar los nacimientos ya que la legislación no permite
inscribir sus nacimientos a menos que hayan nacido vivos y sobrevivido 48
horas*.
La falta de formación para los profesionales de la salud
es bastante frecuente y ocurre en muchísimos países, cosa que lentamente va
cambiando pero que llevará todavía un tiempo el que sea una práctica habitual. Lo
mismo ocurre con la inscripción de los nacimientos*. Por este motivo se están
realizando campañas en diversos países sobre «romper el silencio» que
suele ir aparejado con éstas muertes.
es bastante frecuente y ocurre en muchísimos países, cosa que lentamente va
cambiando pero que llevará todavía un tiempo el que sea una práctica habitual. Lo
mismo ocurre con la inscripción de los nacimientos*. Por este motivo se están
realizando campañas en diversos países sobre «romper el silencio» que
suele ir aparejado con éstas muertes.
Liliana M. Lund
www.espacioperinatal.com* Sobre la inscripción de los nacimientos, en España se llevó a cabo una campaña para apoyar la Reforma Amanda, os remito a la web de referencia, Duelo Gestacional y Perinatal, desde donde Mónica Álvarez y Rocío Cuellar iniciaron el largo camino que finalmente pareció dar sus frutos con un cambio en la ley, cuya aplicación sin embargo se ha prorrogado. En los enlaces encontraréis toda la información detallada. Tenemos mucho que agradecer a mujeres como ellas y a todos los padres que no se conforman y luchan por dignificar a sus bebés fallecidos.